Aves que nadan

Cuando uno oye hablar de aves marinas y no sabe mucho de ornitología, se le ocurre una palabra: gaviotas. Pero lo que la mayoría de la gente no sabe es que hay 6 especies diferentes de gaviotas en España (sin contar las raras u ocasionales), ni que es más común de lo que se piensa encontrarlas lejos de la costa.

Aves nadadoras

No todas las aves saben nadar, las que sí tienen adaptaciones especiales que les permiten hacerlo.

Patos, gansos y cisnes
Tienen los pies palmeados y un plumaje denso y graso que los mantiene secos cuando están en el agua buscando comida. Son animales que viven en tierra, en el agua y pueden volar largas distancias cuando migran. Normalmente controlan su flotabilidad con sus airbags.

Pingüinos
Son las mejores aves nadadoras del mundo, su denso plumaje y capa de grasa las mantienen aisladas térmicamente mientras nadan largas distancias en busca de alimento.

Aves que nadan y vuelan

¿Cómo es una ave acuática? No hay una manera general. El plumaje es muy denso e impermeable para quienes nadan, se sumergen o viven en zonas muy frías; por otro lado, es escaso si las aves no mojan el plumaje diariamente. Sus picos son diferentes dependiendo del alimento para el que se han especializado y sus patas difieren según la forma de desplazamiento.

Aquellos que viven en lugares donde hay nevadas y agua helada vuelan en el otoño para pasar esos meses en áreas más cálidas donde pueden conseguir comida. Millones de aves se desplazan cada año, enfrentándose a los peligros de la migración (tormentas, depredadores, cazadores, aguas contaminadas, enfermedades, hábitats deteriorados, falta de alimento, agotamiento), lo que las convierte en verdaderas supervivientes.

Aves costeras

Las aves marinas son aquellas que se adaptan a la vida en el medio marino, de donde obtienen la mayor parte de su alimento. Las aves marinas pasan la mayor parte de su vida en el mar o en las cercanías del mar, excepto quizás durante la temporada de reproducción, que normalmente se pasa en la costa. Este grupo no tiene valor taxonómico, podríamos decir que es un grupo que no se utiliza científicamente. Por lo tanto, diferentes especies pueden pertenecer a órdenes diferentes, pero la adaptación a un entorno similar ha llevado a cierta convergencia evolutiva.

En general, viven más tiempo que otras aves, crían más viejos y ponen menos huevos (algunas especies ponen sólo un huevo al año), ya que pasan gran parte de su tiempo cuidando a sus crías. La mayoría de las especies se reproducen en colonias, que pueden ir desde unas pocas docenas hasta millones de aves y anidan en lugares inaccesibles como islas o acantilados. Muchas especies son famosas por hacer largas migraciones anuales, cruzar el ecuador o, en algunos casos, ir de un extremo a otro de la Tierra. Se alimentan tanto de la superficie del océano como del interior, e incluso pueden alimentarse el uno del otro.

Las aves marinas pueden ser altamente pelágicas, costeras, o en algunos casos pasar la mayor parte del año lejos del mar. Así, las aves marinas que pasan la mayor parte de su vida en alta mar son llamadas aves pelágicas u oceánicas, para diferenciarlas de las aves playeras o llamadas aves marinas que pasan gran parte de su tiempo en tierra. Algunos ejemplos de aves marinas pelágicas son los albatros o las pardelas.

Las aves marinas son un tipo de ave adaptada para la vida en hábitats marinos. Aunque son muy diferentes en términos de estilo de vida, comportamiento y fisiología, tienden a mostrar casos de evolución convergente, dado que los mismos problemas relacionados con el medio ambiente y los mismos nichos de alimentación dieron lugar a adaptaciones similares. Las primeras aves marinas evolucionaron en el Cretácico, mientras que las familias modernas emergieron en el Paleógeno.

En general, las aves marinas viven mucho tiempo, se reproducen más tarde y tienen menos individuos jóvenes que consumen mucho tiempo en sus poblaciones. Muchas especies anidan en colonias, que pueden variar en tamaño de una docena a millones de aves. Otros son famosos por realizar largas migraciones anuales, guiándolos a través del ecuador o alrededor de la Tierra en muchos casos. Pueden alimentarse de la superficie del océano o en sus profundidades, e incluso entre ellos mismos. Algunos son pelágicos o costeros, mientras que otros pasan parte del año lejos del mar.

La morfología de las aves marinas depende de muchos factores. Por ejemplo, la simetría de los cuerpos de las aves depende del tipo y funciones del vuelo, que caen dentro de las categorías de caza de alimento, movimiento a sitios de nidificación o reproducción, y migración. Una ave marina tiene, en promedio, una masa corporal de unos 700 g, una envergadura de 1,09 m y una superficie alar total de 0,103 m2. Sin embargo, estas variables dependen del mecanismo de vuelo y de la etiología de la especie.

Las aves marinas y los seres humanos tienen una larga historia de convivencia: han proporcionado alimento a los cazadores, han guiado a los pescadores a los caladeros y a los marineros a la orilla. Dado que muchas especies están amenazadas por las actividades humanas, los movimientos de conservación del medio ambiente las han tenido en cuenta.

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